El anuncio del presidente Donald Trump, quien prometió este viernes otorgar un “indulto total y completo” al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, reactivó un entramado político que viene documentándose desde hace años: la relación entre el mandatario hondureño, la poderosa firma de lobby BGR Group y Marco Rubio, hoy secretario de Estado de Estados Unidos (EEUU).
El presidente narco contrató a grupos de presión republicanos para cantar sus elogios en Washington.
En abril de 2018, el entonces senador de Florida, Marco Rubio tuiteó gracias al presidente hondureño Juan Orlando Hernández por “dirigir a los narcotraficantes” debajo de una foto de los dos hombres juntos.
Actualmente, Trump condicionó además el apoyo de su gobierno a Honduras a una victoria del candidato Tito Asfura. Esto deja claro que Washington solo respaldará al país centroamericano si el nuevo gobierno se alinea con sus preferencias políticas.
Pero para quienes siguen esta historia desde hace tiempo, el indulto prometido a Hernández no debería sorprender.
Un recordatorio necesario: el vínculo Hernández–BGR–Rubio
Como documentó un trabajo de investigación de la revista VICE, Juan Orlando Hernández firmó a inicios de 2020 un contrato con la firma de cabildeo BGR Group por un total de 660.000 dólares, con el objetivo de reforzar su imagen en Washington como un aliado confiable y un combatiente del crimen organizado.
Lo hizo precisamente en el momento en que el entorno judicial del mandatario comenzaba a desmoronarse: su hermano, Juan Antonio “Tony” Hernández, quedó sentenciado a cadena perpetua por traficar toneladas de cocaína hacia Estados Unidos durante más de una década.
Aunque Juan Orlando Hernández negó siempre las acusaciones que surgieron en ese y otros juicios, los testimonios recogidos por fiscales estadounidenses señalaban que el entonces presidente no solo sabía, sino que participaba y recibía sobornos para financiar sus campañas.
En medio de ese escenario, BGR Group la empresa fundada por el republicano Haley Barbour comenzó a operar a toda máquina a favor del mandatario hondureño:
Contactó a personal del Congreso, distribuyó comunicados de prensa, organizó acercamientos y buscó reforzar la percepción de Hernández como un socio confiable de Washington.
El nombre de Marco Rubio en el centro del tablero
Según el reportaje de VICE, Marco Rubio es, históricamente, uno de los principales beneficiarios de las contribuciones políticas de BGR Group.
La firma organizó eventos de recaudación para Rubio en sus campañas al Senado de 2010 y 2016, así como en su corta campaña presidencial.
Tras la firma del contrato con Honduras, BGR contactó a 11 empleados del Congreso; tres habían trabajado directamente con Rubio.
Es decir: el gobierno de Hernández pagó a una firma estrechamente vinculada a un político que hoy, desde el Departamento de Estado, participa en la definición de la política exterior hacia Centroamérica.
El indulto de Trump no sorprende
La promesa de Trump de liberar a Juan Orlando Hernández condenado en Estados Unidos por narcotráfico adquiere un significado distinto cuando se observan estas conexiones:
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Hernández pagó 660.000 dólares a una firma profundamente ligada al Partido Republicano.
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Marco Rubio, hoy a cargo de la política exterior estadounidense, fue uno de los mayores beneficiarios del financiamiento político de esa misma firma.
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BGR Group defendió activamente la imagen de Hernández, incluso mientras fiscales estadounidenses documentaban su presunta complicidad con redes de narcotráfico.
Por eso, para quienes conocen el historial, el anuncio del indulto no es un gesto aislado, sino una pieza más en una red de intereses, favores políticos y relaciones que se remontan a años atrás.
