Según un análisis del medio New York Times, la relación histórica entre la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y América Latina está marcada por un patrón de intervenciones directas y a menudo “sórdidas”, lo que refleja que EEUU maneja una política exterior de larga data caracterizada por la coerción militar y la injerencia en la soberanía.
El análisis implícito sugiere que episodios como la guerra con México, el desembarco de tropas en Cuba, o la invasión de Panamá para deponer a un gobernante, son ejemplos concretos de un historial donde Washington priorizó sus intereses estratégicos sobre el respeto a la autodeterminación de los países.
Por consiguiente, resalta como después del fin de la guerra Fría, Donald Trump toma acciones encubiertas en contra de Venezuela y según las propias declaraciones de funcionarios estadounidenses, intensifica una campaña contra el presidente Nicolás Maduro Moros.
Asimismo, el New York Times advirtió sobre el historial controvertido y las operaciones encubiertas de la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
En relación al análisis del medio se presentan algunas operaciones bajo perfil:
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Un golpe en Guatemala: Como parte de la investigación, el medio relata cuando derrocaron a el presidente electo de Guatemala, Jacobo Árbenz Guzmán, en un golpe de estado en 1954. El gobierno de Eisenhower (presidente de EEUU) lo describió como un levantamiento contra un gobierno comunista aliado con la Unión Soviética.
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La invasión de Bahía de Cochinos: New York Time, relata como después de la llegada de Fidel Castro al poder en Cuba en 1959, las relaciones de su gobierno con Washington se deterioraron rápidamente. La CIA pronto comenzó a hacer planes de invasión, ayudando a armar y entrenar a una fuerza anticastrista en una base secreta en Guatemala.
- Intentos de asesinato: La CIA realizó al menos ocho complots para asesinar a Castro, según un informe del Comité de Inteligencia del Senado que se hizo público en parte en 1975 y se divulgó por completo mucho tiempo después.
- Un “clima golpista” en Chile: Tan pronto como Salvador Allende asumió la presidencia socialista de Chile en 1970, el gobierno del presidente Nixon comenzó a planear acciones contra él, preocupado de que pudiera convertirse en un modelo para otros países. La CIA buscó “crear un clima golpista” maximizando la presión sobre el gobierno chileno, según documentos estadounidenses desclasificados.
Finalmente, el análisis de New York Time utiliza los casos históricos para establecer el patrón y luego conectar estas acciones pasadas con eventos recientes; como ejemplo las acciones contra Venezuela por parte de Trump, sugiriendo que la táctica de la injerencia encubierta persiste más allá del fin de la Guerra Fría.










